En ninguna de mi vida, creí que esto pasaría; no lo pronostique, ni lo apunte en mi proyecto de vida tan imperfecto, ahora simplemente se esta dando... Un macabro huracán de pensamientos, pensamientos que traen ideas, ideas que traen proyectos, proyectos que traen ilusiones; ilusiones que traen temores... y es aquí donde entra el afán desesperado por hallar una solución a los incontables problemas que esto me trae.
Cuando por fin, creo tener la solución a todo esto, aparece de las tinieblas del incomprensible mundo; una mano que nubla esa pequeña ilusión que sobrevivió a tantas adversidades en este mundo siniestro que esta en mi mente!.
Los deseos comienzan a llenar el espacio de mi tiempo, y se complementan con una pequeña porción de preocupación. Deseos que solo buscan que aparezca de la nada una solución diferente a la Muerte.