1. ¿En dónde orar?
Define un lugar específico en el que puedas encontrarte con Dios todos los días. Busca tener intimidad con él. En En honor al Espíritu Santo, Cash Luna asegura que Dios quiere formarnos en privado y allí hablarnos acerca de todo lo bueno que hacemos y lo que debemos mejorar.
Pero tú, cuando te pongas a orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu padre, que está en lo secreto. Así tu Padre que ve lo que se hace en el secreto, te recompensará. Mateo 6:6 (NVI).
2. ¿De qué hablar?
En su libro Las siete oraciones que Dios siempre contesta, Jason Frenn asegura que es difícil encontrar una conversación que no debieras tener con Dios, sobre todo si tú deseo de acercarte a él es sincero. Mientras más le abras tu corazón, más te abrirá él el suyo.
Así que acerquémonos con toda confianza al trono de la gracia de nuestro Dios. Allí recibiremos su misericordia y encontraremos la gracia que nos ayudará cuando más la necesitemos. Hebreos 4:16 (NTV).
3. ¿Cómo mantenerse?
Johnnie Moore escribe en Honestamente que las relaciones mueren por falta de alimento. Las relaciones prosperan cuando se alimentan un día a la vez con las cosas adecuadas; tu relación con Dios no es la excepción.
Así que no nos cansemos de hacer el bien. A su debido tiempo, cosecharemos numerosas bendiciones si no nos damos por vencidos. Gálatas 6:9 (NTV).
4. ¿Qué pasa con las dudas?
Para que tu fe crezca necesitas ejercitarla. Darle a tu mente la orden es un buen comienzo; pero, para adquirir una fe genuina debes conocer por ti mismo que Dios es real y que desea tener una relación contigo ¿Cómo hacerlo? No dejes de orar, hazle preguntas a Dios.
De hecho, sin fe es imposible agradar a Dios. Todo el que desee acercarse a Dios debe creer que él recompensa a los que le buscan con sinceridad. Hebreos 11:6 (NTV).
5. ¿Cuándo orar?
Si esperas orar en el tiempo que tienes de sobra, nunca lo harás, para orar necesitas esforzarte. Te recomendamos que sea lo primero que hagas cada día en la mañana. Asegúrate de tener a primera hora la cita más importante de tu día.
Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten. Mateo 6:33 (NTV).
6. ¿Cuánto tiempo?
En No deje de insistirle a Dios, Hank Kunneman asegura que para desarrollar una vida de oración sólida es necesario comenzar por lo poco e ir en aumento en el tiempo de oración. Al principio el hábito de la oración requiere de mucha disciplina, pero con el tiempo, la oración se vuelve una necesidad.
Me mostrarás el camino de la vida, me concederás la alegría de tu presencia y el placer de vivir contigo para siempre. Salmos 16:11 (NTV).
Algunos consejos finales:
Sonriendo
Fuente: Massimo Ankor
Haz una lista de cosas por las que deseas orar.
Busca una posición cómoda, pero no demasiado cómoda para que termines dormido.
Procura que la oración sea entretenida.
Ora siempre, cuando estés en las buenas y en las malas.
Dios es real, tan real como una persona; trátalo como tal.
Lleva un diario de oración. Escribe una lista de las oraciones y subraya aquellas que ya fueron contestadas.
Apunta lo que Dios te dice a través de la Biblia, las cosas que te suceden o cuando escuchas su voz audible.
